Y retomamos la reseña (para quienes no lo sepan tienen la primera parte aquí) allá donde la dejamos, concretamente en el capítulo 3 ‘Los Mitos de Cthulhu’. El primer apartado de este capítulo es Dioses y Titanes, que trata sobre las grandes entidades del universo. La particularidad de este capítulo es que se nos presentan varias teorías o rumores sobre dichas entidades, en algunos casos incluso contradictorios entre si. Además la única estadística que tiene cada una de estas criaturas -para más inri recogida en una tabla llamada “mecánica de los dioses”- son la de perdida de estabilidad y cordura. Quisiera recalcar que en todo este capítulo hay varios recuadros hablando de diversas facetas del trasfondo: desde el elementalismo a añadir más dioses que harán las delicias de los aficionados al mundo de los Mitos.
El segundo apartado del tercer capítulo es Tomos y Magia, este apartado en realidad se divide en dos partes relacionadas, la primera lista varios tomos relacionados con los Mitos junto con su trasfondo y lo que proporciona su lectura. La segunda describe como aprender y lanzar hechizos además de describir una serie de encantamientos y rituales.
El tercer es el de Criaturas, que nos trae las reglas básicas y algunos consejos para tratar los encuentros con las criaturas menores de los Mitos. A este apartado le sigue el de Razas Alienígenas, que trae el trasfondo y las estadísticas de los monstruos de los Mitos. Bestias y Monstruos el siguiente apartado trae las estadísticas de criaturas no de los mitos de un león a un alosaurio incluyendo un vampiro o una momia entre otros. Sectas y Sectarios define varias sectas activas en el mundo además de incluir ganchos de aventuras que las incluyan.

El capítulo 4 ‘Los Años 30’ nos mete de lleno en la turbulenta década de juego oficial de El Rastro de Cthulhu. Si, este juego sustituye los ortodoxos años 20 por la siguiente década, la década de la Gran Depresión y el ascenso del totalitarismo. El primer apartado de este capítulo Una Década Desesperada trata de describirnos la época en tres grandes apartados: Pobreza, Hambruna y Guerra. El segundo apartado Regiones de Pesadilla nos describe desde Abisinia hasta la Unión Soviética el mundo nación a nación (y esta vez no se olvidan de un apartado adecuado para España).
El tercer apartado de este capítulo deja el trasfondo puro para pasar a Tecnología, Armas y Equipo sobre el que hay poco que decir, el capítulo de equipo de la época.
Los siguientes apartados forman más bien un capítulo aparte Juntándolo Todo que básicamente es el capítulo de consejos para jugadores y guardianes. En este apartado hay cosas que merecen la pena leer, en especial en la sección de guardianes. Por su parte Marcos de Campaña nos muestra tres ejemplos de estructuras básicas de campañas además de consejos de cómo crearlas en tu juego de El Rastro de Cthulhu, un capítulo que por si solo ya muestra lo diferente que es de otros juegos de Cthulhu (más que nada por que ni pensarían en necesitar un capítulo sobre campañas).
El capítulo 5 ‘El Horror de Kingbury’ es una pequeña aventura que nos lleva al 12 de agosto de 1938 a Cleveland, Ohio, en plenos Asesinatos de los Torsos, como podéis suponer no voy a decir más de la aventura aparte d que trae una breve información sobre Cleveland y unos mapas inservibles (por que no se ven apenas, excepto unos tácticos).
El manual termina con cuatro apéndices, el primero de conversión entre el BRP y el GUMSHOE, el segundo de fuentes y recursos de los Mitos para encontrar inspiración, el tercero varios documentos útiles fotocopiables y el cuarto una gracia indicando los colaboradores del manual.
La verdad es que este manual es toda una delicia par los aficionados del Cthulhu, en especial si eres un aficionado que durante años o décadas has estado deseoso de jugar campañas de terror con el fondo de los Mitos sin tener que sufrir un reglamento asfixiante (ojo no lo crítico con esa palabra, si no que me refiero a que es excesivamente mortal y excesivamente restrictiva con la cordura que será ortodoxo pero estrangula el juego con ello para los que no buscan la ortodoxia), y eso es lo que contempla ese juego. Y no solo lo contempla, si no que se queda con ambas opciones. Eso sí, Edge se columpia con sus precios, y si normalmente hablamos de tirar a la alza con manuales básicos de casi 400 paginas en color por 40 euros aquí tenemos uno en B/N (vale con tonos sepia, pero no tanto) de 250 paginas por 40 euros. Desde luego aunque no me arrepiento de haberlos pagado lo desquiciado de la política de precios se merece como mínimo una modesta colleja desde aquí (y que no me digan que podrían haber apurado a 35, quizás 30 habría sido apurado, pero no 35). De todos modos, aún con la tomadura de pelo de estos señores que “siguen publicando rol” el manual vale realmente la pena.
Share This