Los hemos apuntado ya en otras ocasiones, pero no nos cansamos de repetirlo. Nosotros no somos diseñadores profesionales, ni escritores, ni nada parecido. Nuestro único bagaje en el mundo de los juegos de rol, como todos ustedes saben, pasa por emular, con mayor o menor fortuna, un conocido sistema de juego. Punto. Así que, cuando nos ofrecieron participar en esta línea editorial de Cliffhanger, nos sentimos un poco abrumados, dada nuestra inexperiencia y escasos conocimientos. Pero bueno, al final aceptamos, con satisfacción, y empezamos a trabajar en lo que se convertiría en Saqueadores. Lo cierto es que diseñar este juego no fue complicado, pues con la matriz primigenia del Sistema Madre ideado por nuestro amigo Octavio Muñoz, todo es bastante más sencillo. Aunque debemos reconocer que sin el concurso del coordinador editorial, Omar, el juego habría sido otra cosa. Gracias a sus consejos y concienzuda revisión pudimos cambiar un buen puñado de cosas que hacen de Saqueadores un juego mucho mejor, y más acorde, con más calidad y afinado. Hemos aprendido mucho, y quizás sea esto lo mejor de todo este viaje.
La verdad es que, por la parte que nos toca, poco podemos añadir, pues todo ha ido según lo acordado y así se ha cumplido. Ya nos hubiera gustado a nosotros haber dispuesto de más tiempo y en mejores condiciones para acometer este proyecto ilusionante con más celo, pero las circunstancias personales y los acontecimientos sucedidos en Lorca, nos restaron mucho tiempo y añadieron muchas preocupaciones imprevistas.
Con todo, estamos enormemente orgullosos del resultado, de este juego sencillo, directo y de infinitas posibilidades. Queremos agradecer a todo el equipo de Ludotecnia, con José a la cabeza, habernos dado la oportunidad de participar en esta línea junto a todos nuestros compañeros que han trabajado y andan trabajando en otros números de Cliffhanger.  Nos sentimos horandos y esperamos estar a la altura. 
Cada vez nos percatamos de cuán difícil es hacer las cosas bien en este mundo. Estar en la palestra, en un lugar que no contemplábamos al inicio de todas nuestras cuitas en el mundillo estos últimos años nos ha desgastado notablemente. Nunca pensamos que algo que brotara de una simple ilusión pudiera generar tantas preocupaciones, perdiendo un poco la esencia que nos embargaba una vez comenzamos con la caja roja, nuestra caja roja, hace ya sus años. Ahora más que nunca, somos conscientes de que tenemos que echarnos a un lado y replantearnos la forma de articular esto de manera que podamos desaparecer discretamente y volver a trabajar a nuestro ritmo y maneras con Walküre, que será editado por nuestro grupo, como hicimos con la primera edición de la caja roja, en un plan de desarrollo a largo plazo.
Ya hablaremos de todo esto un poco más adelante.
Seguimos con las fotos de nuestra pequeña criatura. Arriba tienen la portada y aquí abajo les ofrecemos la foto de la contraportada.

Primeras páginas del libro, con los créditos.
Y algunos ejemplos del interior, con las magníficas ilustraciones de Virgina Berrocal, sin duda lo mejor del juego.

Parte final del libro dedicada a la aventura, que fue escrita íntegramente por Crístóbal.

En fin, ya saben las particularidades que rodean a esta criatura y todo lo acontecido, por ello, y a modo de advertencia, me gustaría decirles: ¡Que la maldición del Faraón caiga sobre todo aquel que no compre este libro, Saqueadores de Tumbas! Y si ya de paso compran alguno más de la línea, pues muchísimo mejor.
Muchas gracias a todos otra vez, y no me cansaré de decirlo: tener hoy aquí este pequeño libro nos llena de ilusión y agradecimiento.
Share This